Brasil, el mayor exportador de carne de pollo del mundo, prorrogó por segunda vez el estado de emergencia zoosanitaria en todo el territorio por causa de la gripe aviar detectada en aves silvestres del país, según informaron este martes fuentes gubernamentales.
El 22 de mayo se cumplirá un año de la promulgación de esta medida, que ha vuelto a ser extendida 180 días por el Ministerio de Agricultura y Ganadería con el objetivo de evitar que este virus llegue a las aves destinadas al comercio.
"Mantendremos el estado de emergencia para evitar que ocurra una posible crisis", afirmó en un comunicado el ministro de Agricultura y Ganadería, Carlos Fávaro.
Al prorrogar esta medida, el Ministerio puede actuar de manera más rápida en la erradicación de los focos, acceder a mayores recursos gubernamentales y colaborar más de cerca tanto con administraciones federales como municipales y otros actores no gubernamentales.
El estado de emergencia por influenza aviar ya fue prorrogado por 180 días el pasado 7 de noviembre.
El primer caso de virus de influenza aviar fue detectado en Brasil el pasado 15 de mayo y desde entonces el Ministerio ha detectado 161 focos de esta enfermedad en aves silvestres y 3 en aves de subsistencia.
El Gobierno de Honduras declaró ayer martes una alerta roja de emergencia en Tegucigalpa, por tiempo indefinido, debido a la contaminación que afecta a la ciudad a causa de una densa capa de humo; y una alerta verde, de prevención, en el resto del país, informó una fuente oficial.
La Secretaría de Estado en los Despachos de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales indicó en un comunicado que emitió la alerta roja por la "alta contaminación atmosférica y mala calidad del aire, producto de una densa capa de humo que afecta la salud de la población capitalina".
Señaló que la alerta verde se mantendrá, también por tiempo indefinido, en el resto del país para monitorear el fenómeno y la salud de la población.
La institución precisó que la capa de humo que cubre Tegucigalpa obedece a la "quema o preparación de las parcelas para la agricultura en toda la región de Mesoamérica, algunos incendios forestales, la contaminación de gases de escape o combustión de vehículos y emisión de gases de la industria".
Se suma a ello la presencia de monóxido de carbono, dióxido de carbono, dióxido de azufre y nitrosos de ozono, que genera el sector transporte y que "son altamente perjudiciales para la salud de la población", añadió.