Para qué sirve tomar agua mineral con sal

El agua es esencial para el ser humano, pues necesitamos estar hidratados para que el cuerpo funcione adecuadamente. De acuerdo con la Secretaría de Salud, este líquido regula la temperatura corporal, facilita la digestión, lubrica las articulaciones y órganos.

Dentro de sus variedades la encontramos mineralizada, es decir, aquella que contiene minerales y sustancias con valores terapéuticos. Y para potenciarlos, se suele combinar con sal o limón.

Al tratarse de una bebida popular, hemos decidido contarte las ventajas y desventajas de tomar agua mineral con sal. 

¿Qué beneficios tiene tomar agua mineral con sal?

Ingerir agua mineral con sal nos permite recuperar los electrolitos que perdemos a lo largo del día. También mejora el rendimiento físico para aquellas personas que realizan deporte o ejercicio con frecuencia.

En conjunto, ambos productos eliminan las úlceras bucales, combaten el mal aliento y previenen el crecimiento de bacterias en lengua y garganta.

Otro de sus efectos positivos es regular la presión arterial, facilitar la absorción de nutrientes en el intestino y eliminar el exceso de acidez estomacal. Sin embargo, hay mucho que considerar antes de añadir esta bebida a la dieta.

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De acuerdo con la revista de salud Elsevier, las aguas bicarbonatadas contienen calcio, sodio y magnesio en grandes cantidades. Consumirla sin moderación podría acarrear problemas de salud.

Y es que el exceso de agua mineral con sal dificulta el funcionamiento del corazón y los vasos sanguíneos. Además, el abuso del sodio se vincula con la hipertensión, formación de cálculos e insuficiencia renal.

¿Cuánta sal se debe consumir al día?

Seguramente te preguntas cuál es la cantidad de sodio que una persona debería consumir al día. La recomendación de la Organización Mundial de la Salud es la siguiente:

Adultos: ingesta inferior a 2000 mg por día, equivalente a menos de 5 g por día.

Niños de 2 a 15 años: no más de 1800 mg al día, aproximadamente 4.3 g de sodio.

Si vas a tomar agua mineral con sal, procura no hacerlo tan seguido y complementa tus alimentos con pescados o mariscos, nueces, frijoles, frutas frescas y ciruela pasa.

Los anteriores alimentos reducen los niveles de sodio en la sangre, explica Mayo Clinic.