FOTO: Ramón Sotomayor
La trascendencia histórica de Guadalupe Victoria es de gran importancia. La vida del primer presidente constitucional de México no puede desprenderse de su contexto político y la coyuntura que significó el paso del virreinato a la república, tras la guerra de independencia. Por tal motivo, en su nuevo libro titulado ‘La República’, el doctor Adolfo Arrioja Vizcaíno aborda la vida de este personaje, lo más destacado de su periodo presidencial y su sobriedad política.
Para el autor, quien visitó Torreón para presentar su obra y ofrecer conferencias en la Universidad Autónoma de La Laguna (UAL), la única utilidad que tiene el estudio de la historia es acatar las lecciones que ofrece el pasado, mismas que otorgan la posibilidad de entender el presente con el fin de no repetir los errores. De ahí su interés por analizar un perfil como el del insurgente.
“Guadalupe Victoria es un personaje al que desafortunadamente la historia de México, en especial la historia oficial, no le ha dado el lugar que merece. Fue un héroe indiscutido en la lucha por la Independencia. Fue el lugarteniente más importante que tuvo el máximo caudillo de nuestra insurgencia: don José María Morelos y Pavón”.
La llegada de Guadalupe Victoria a la presidencia en 1824 ocurrió por consenso de las fuerzas políticas del país. Ante sus ojos, el territorio nacional mostraba una complicada transición. La nueva república liberal necesitaba dirección para dejar atrás un sistema virreinal que imperó durante tres siglos, crear instituciones, dividir poderes, instaurar la democracia representativa y el sistema federal de gobierno.
“Era un reto enorme cambiar las estructuras que habían regido durante 300 años por algo completamente nuevo, lo cual la naciente república iba apenas a experimentar. Guadalupe Victoria, al intentar llevar a México en esta transformación tan radical, nos deja una lección: él entendió desde un principio que la única forma de consolidar la independencia republicana de nuestro país era creando un gobierno de unidad nacional, en el que estuvieran representadas de forma armónica todas las fuerzas políticas que prevalecían en el México de aquel entonces”.
Con la unidad nacional como fin común, el nuevo presidente debía gobernar por encima de partidos e ideología. No obstante, más adelante, el gobierno de Guadalupe Victoria fue dañado por las divisiones políticas generadas entre los mismos mexicanos y también por la intervención de Joel R. Poinsett, el primer embajador de Estados Unidos en México (lo cual se consolidó 20 años más tarde con la cesión del 50 por ciento del territorio nacional original al vecino del norte).
“Entonces, la lección en los tiempos actuales, que nos deja Guadalupe Victoria, es que cuando los mexicanos nos dividimos, nos enfrentamos, el país va a al fracaso y queda abierto a las intervenciones extranjeras. Lección que tiene validez en la actualidad, porque estamos viviendo un momento de divisiones políticas, de enfrentamientos ideológicos, de polarización que no va a dejar nada bueno para el futuro del país”.
El historiador apunta sus palabras hacia el próximo 2 de junio, día en que se efectuarán las elecciones presidenciales en México. Indica que hay que aprender de Guadalupe Victoria y sucedido durante su mandato. Luego cita al coahuilense Artemio de Valle Arizpe y expresa que escarbar en el pasado es difícil, sobre todo ante un personaje poco estudiado como el que protagoniza su libro.
“No es fácil encontrar fuentes documentales, sobre todo fuentes documentales auténticas. Me costó muchísimo trabajo, por ejemplo, conseguir la colección completa de todos los discursos que pronunció durante su periodo presidencial. Para que tenga usted una idea, es una edición de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) que se hizo en 1960, hace más de 60 años. Entonces, cuesta trabajo, pero conforme va uno conociendo al personaje a través de sus discursos, de su correspondencia, de los testimonios que dejaron sus contemporáneos”.
El libro del doctor Guadalupe Victoria se encuentra a la venta a través de la UAL y según indicaron autoridades académicas, lo recaudado se destinará a ayudar a las familias y jóvenes de la Rondalla Menor, que resultaron afectados tras un accidente de carretera sufrido en marzo pasado.