Diputado Tereso Medina Ramírez. (ARCHIVO)
A cinco meses de concluir la actual legislatura, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha sido un contrapeso significativo para el gobierno federal, capaz de frenar reformas que hubieran afectado a los mexicanos, según declaraciones del diputado Tereso Medina Ramírez.
Señaló que el partido ha destacado en su papel en la oposición al Ejecutivo, enfocándose en evitar la aprobación de iniciativas impulsadas por "ocurrencias" o intereses partidistas.
Citó como ejemplo la reforma energética, los intentos de modificar al Instituto Nacional Electoral (INE) y de afectar la autonomía del Poder Judicial.
Medina Ramírez enfatizó el compromiso con la democracia y el respeto a los poderes del Estado y subrayó que la labor legislativa estuvo orientada hacia el bienestar del país a largo plazo, más allá de intereses partidistas inmediatos.
De igual forma lamentó la falta de voluntad del partido en el poder, para colaborar en la construcción de leyes que beneficien a México en su conjunto.
“Ha sido un reto enorme el que estamos viviendo en una legislatura en donde faltó el diálogo, faltó el consenso, faltó la propuesta, no por nosotros, que quede claro, no por la fracción parlamentaria del PRI”, recalcó.
Consideró que el partido en el poder asumió una actitud irresponsable al olvidarse que un legislador es electo por la gente para construir leyes y no para apoyar un sexenio.