En pleno proceso de alzamiento electoral contra la continuidad de la llamada Cuarta Transformación, no ayuda a la élite de la iglesia católica la postura del obispo emérito Salvador Rangel, quien ayer emitió un comunicado elusivo respecto a lo que le sucedió luego que fue dado por desaparecido y su posterior aparición polémica, en circunstancias personales contrarias a sus compromisos sacerdotales.
En lugar de transparentar lo sucedido en esos días oscuros, refutar sin concesiones la narrativa que hoy le es adversa y denunciar los intereses, grupos o personajes que le hubieran tendido una celada o le hubieren amenazado y maltratado, el obispo emérito de Chilpancingo-Chilapa ha optado por asumir un papel de víctima que prefiere perdonar a sus presuntos martirizadores, tanto en el plano espiritual como en el judicial, pues anunció que tampoco presentará denuncia de hechos para que poderes terrenos actúen contra su(s) supuesto(s) verdugo(s).
Con esa postura esquiva, el obispo Rangel deja el camino libre a las especulaciones en general y, en particular, a los señalamientos del comisario de seguridad de Morelos, que atribuyeron el episodio del jerarca religioso a asuntos sumamente mundanos. También debería ayudar este incidente a la élite de la iglesia católica a recalibrar sus abiertas pretensiones de activismo electoral opositor, que no están encontrando las suficientes mechas coadyuvantes en la confección de presuntas teas salvíficas de una nación, dicen, colocada al borde de los abismos, entre ellos el del comunismo.El diputado federal Hamlet Almaguer, representante suplente de Morena ante el INE, estima que el acto en el Zócalo capitalino de la “marea rosa”, en apoyo a Xóchitl Gálvez y Santiago Taboada, implicará una erogación de entre 30 y 50 millones de pesos que deberán ser cargados a los gastos de campaña de la coalición pripanista.
Considerado como un “acto abierto de proselitismo”, todo un “acto de campaña”, “tiene dos repercusiones: que las y los candidatos que asistan tienen que reportar esta actividad en su agenda ante el Instituto Nacional Electoral” y que, “a partir de ahí, el INE, a través de sus monitores, verificadores y supervisores, asista al evento y tome nota de todo lo que se está gastando en torno a esta actividad”. Es decir: “los supervisores del INE tienen que cuantificar los gastos y acumulárselos a los topes de gastos de campaña que hayan reportado la candidata Gálvez y el candidato Taboada”.
ASTILLAS: De gira en Veracruz, con el fantasma inmobiliario de Rocío Nahle presente de diversas formas, la científica de la cola de caballo atribuyó las penurias demoscópicas de la oposición a su campaña de odio, que “a lo mejor les funcionó en el 2006 pero eso ya no”, pues, “para nosotros lo importante es que la esencia de una elección sean las propuestas y no este enojo que trae la oposición, que por otro lado es entendible, no creo que sea fácil ir 20, 30 puntos abajo en las encuestas; deben estar un poco molestos”... La candidata fi- lopanista que asegura tener ovarios del tamaño de las toronjas ayer se dijo atemorizada: “Creo que estamos llenos de miedo. Después de lo que le pasó a María Amparo (Casar), dicen: ¿quién es la siguiente?, ¿quién se atreve a levantar la mano y exhibir lo que está pasando?; mañana salgo yo en la mañanera”... Desde Zapopan, Jalisco, el aspirante presidencial dantesco ha pedido a la hidalguense de las gelatinas que “acepte” que ya la rebasó en intención de voto y se dijo amenazado por los enojos de su adversaria: “Hago responsable a Xochitl Gálvez de estos actos de provocación que están organizando desde su coordinación de campaña. No- sotros no hemos interferido con ninguno de sus even- tos. Ya lo intentaron en Morelia y (como ha sido su campaña) resultó un fiasco. ¿Qué quieren provocar?”... ¡Hasta mañana!