Mejor película. El norte sobre el vacío, de la directora Alejandra Márquez Abella.
Pasaron 22 años para que Alejandro González Iñárritu ganara un premio Ariel, máximo reconocimiento para el cine mexicano y lo hizo con Bardo, falsa crónica de unas cuantas verdades, que la noche de este sábado consiguió ocho estatuillas entre ellas Dirección, Actor y Fotografía.
"Regresar a este premio después de Amores perros, estoy humildemente agradecido", dijo el llamado "Negro".
"Desde el inicio, aún antes del rodaje siquiera, nos han abrazado y literalmente nos han hecho sentir en casa, me siento muy honrado y sobre todo muy contento de compartir esta nominación con increíbles cuatro talentosas directoras", añadió.
Bardo significó su retorno a México en plan profesional, luego de que durante dos décadas filmó prácticamente en el extranjero, a excepción de unas secuencias en Babel.
Pero fue El norte sobre el vacío, de Alejandra Márquez Abella, quien se llevó la máxima estatuilla de Mejor Película, obteniendo en total dos galardones, al contabilizar el de Coactuación Masculina en la piel de Raúl Briones.
Arcelia Ramírez, por su trabajo en La civil, donde interpreta a una mujer en busca de su hija, se llevó el premio a Mejor Actriz.
Para Ramírez fue una gran velada, pues además de su premio, su hija Emilia Berjón, se llevó el de Revelación Actoral por Trigal.
"Creo nunca se va a repetir en la vida", exclamó Arcelia emocionada.
"Ojalá México camine a que no permita que haya una 'Cielo' (nombre de su personaje) más en este país", abundó ya en tono serio, en alusión a la temática del filme que protagoniza.
Marcela Fernández Violante, una de las merecedoras del Ariel de Oro por su trayectoria, no asistió por cuestiones de salud, yendo en su representación su hijo Ernesto Sánchez Fernández.
"Es para mí un honor contar con este reconocimiento, el cual me llena de orgullo", mandó decir por medio de un mensaje escrito.
En el mismo agradeció a sus hijos aguantar sus ausencias laborales y destacó a la UNAM como su Alma Máter.
La cinta de terror Huesera, que arribó como la más nominada con 17 opciones, logró cuatro estatuillas entre ellas Ópera Prima y Guion Original.
Durante el In memoriam, dedicado a productores, cineastas, actores, actrices y trabajadores del cine mexicano desaparecidos en el último año, aparecieron en pantalla Alonso Echánove, Carmen Sevilla, Farnesio de Bernal, Fernando Becerril, Gina Román, Irma Serrano, Pablo Milanés, David Ostrosky, Polo Polo, Rebecca Jones, Héctor Bonilla e Ignacio López Tarso.
PIDEN APOYO PARA EL CINE
Sin decir su nombre, la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas hizo un llamado a las virtuales candidatas a la Presidencia de la República, Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, para que atiendan a la cultura en México.
Leticia Huijara, presidenta de la AMACC, dijo durante la entrega de premios, que no puede haber agenda electoral y gobierno sin que se haga caso al arte y la cultura.
Recordó que la Suprema Corte de Justicia ordenó restituir los artículos de la ley quitados durante la actual administración, que hacían obligatorio el apoyo gubernamental al cine mexicano.
El gobierno ordenó eliminar al Fidecine, figura legal responsable de apoyar a las producciones mexicanas, poniendo en su lugar al actual FOCINE, que sólo es administrativo, por lo que en cualquier momento puede ser retirado.
"Desde la AMACC hacemos un respetuoso llamado a las autoridades correspondientes para retomar el diálogo abierto con la comunidad cinematográfica con el fin de analizar conjuntamente cuál es el mecanismo más adecuado para garantizar el fomento de manera autónoma y eficaz", indicó.
"Conocemos a dos de las candidatas que contenderán por la Presidencia de la República, aprovechamos esta coincidencia para recordarles que es impensable una agenda electoral y de gobierno que no contemple la educación, el arte y la cultura como prioridad en sus agendas. Como ejes rectores de políticas públicas que promuevan la equidad, igualdad y los derechos fundamentales del ser humano", destacó.
Huijara recalcó que el cine es un factor para mostrar la realidad y es una conquista que debe defenderse.
"A pesar de que muchas de nuestras creaciones reflejen problemas lacerantes de nuestro país, tales como la violencia e impunidad que no han dejado de crecer en los últimos años, nuestro cine es arte, identidad, cultura y entretenimiento.
"Es generador de riqueza no solo audiovisual, sino que la derrama económica que generan los contenidos pone sobre la mesa la necesidad de reconocer a esta industria como un sector estratégico para el desarrollo de nuestro país", puntualizó.