FOTOS: IMCE
La artista baja por las escaleras del Banco de México que conducen al Museo de la Moneda. Está a minutos de inaugurar su exposición pictórica ‘Los hijos de su madre’, en la galería de este recinto. El evento es coordinado por el Instituto Municipal de Cultura y Educación (IMCE). Es jueves por la noche y el vestíbulo comienza a llenarse de visitantes.
Daría Rivera Martínez tiene estudios en diseño gráfico y pintura. Su más reciente proyecto consiste en una recopilación de su trabajo artístico realizado desde el año 2008, cuando dio sus primeros pasos en un proceso terapéutico. Por eso cada trazo tiene un rasgo personal, una parte de su ser interno.
“Habla de la violencia tanto emocional como física en los niños. Y es un tema que por ser algo que se hace en el seno de la familia, en muchas veces se esconde. Tengo mucho tiempo trabajando en ello y se van viendo las diferentes etapas que he tenido en mi desarrollo tanto pictórico como psicológico”.
Violencia: uso intencional de la fuerza física o el poder real o como amenaza contra uno mismo, una persona, grupo o comunidad que tiene como resultado la probabilidad de daño psicológico, lesiones, la muerte, privación o mal desarrollo.
Infancia: etapa de la existencia de un ser humano que inicia en el nacimiento y se extiende hasta la pubertad.
Ambos conceptos se cruzan en ‘Los hijos de su madre’. Sobre los cuadros, realizados con técnicas como óleo, acrílico, collage, dibujo y tinta china, se muestran figuras de fetos, bebés recién nacidos. También aparece la artista como madre y como hija. La infancia y la maternidad no se desligan.
“En esta serie estoy trabajando los arquetipos de Carl Gustav Jung. Hay un arquetipo que se llama ‘el niño divino’; simboliza la parte de nosotros mismos, que representa la creatividad, la parte juguetona, pero también inmadurez y estas cuestiones de dolores infantiles, que están como guardados y no salen, que cuando se revelan te generan cierto terror. Es como esa representación psíquica del Yo interno”.
La artista reflexiona sobre esas huellas de violencia infantil que acompañan a los adultos. Habla de las madres, de cómo deben abordar esas heridas para ejercer la crianza. Urge una sociedad más sana, ecuánime, paciente, capaz de dar dirección a los hijos sin violentarlos.
“La exposición se llama ‘Los hijos de su madre’, porque nosotras como madres (tengo tres hijos) somos las que estamos criando a esos seres, que dependiendo de cómo los vayamos a tratar, se convertirán en las generaciones que vienen, las que nos darán el futuro”.
Daría Rivera Martínez señala un cuadro: Autorretrato de integración. Allí aparece la artista acompañada de sus hijos. La obra representa el momento en el que logra integrar todas esas partes interiores que la constituyen y que trabajó durante un largo periodo. El cuadro incluso la salvó de una depresión que amenazaba con desbordarla tras la muerte de su padre.
Otro aspecto destacado es el referente a los medios de comunicación. Hay cuadros pequeños con rostros de bebés, pero cada uno tiene un elemento de algún programa de televisión. La artista contempla sus obras, son como un espejo; confiesa que en algunas ocasiones se les salen las lágrimas.
“Los medios de comunicación, la mayoría de las veces, son reflejo de nuestra sociedad. Entonces, estoy representando esta sociedad en la infancia; cómo nosotros, por medio de la educación que le damos a los hijos, nos vamos convirtiendo en estas cosas que están aquí”.
Respecto a la inauguración de la muestra, Daría comenta que se trata de un cierre de periodo, de su evolución como artista y persona.