(SERGIO A. RODRÍGUEZ)
A través de su cuenta oficial de Twitter, la organización no gubernamental Familia Pasta de Conchos celebró que por primera vez la Fiscalía General de la República FGR proceda contra el concesionario de una mina siniestrada.
El organismo social así reaccionó ante el anuncio de la dependencia federal sobre la aprehensión, imputación y vinculación a proceso de Luis N, acusado de explotación ilícita de un bien que pertenece a la Nación.
En septiembre las autoridades federales habían capturado a Cristian N, presunto dueño de la mina el Pinabete.
Fue acusado del mismo delito y encarcelado, Familia Pasta de Conchos en su momento señaló que era sólo un chivo expiatorio y que el verdadero dueño de la empresa Carbonera estaba oculto en una maraña de términos legales y escondido de las autoridades.
Luis G es presuntamente uno de los concesionarios de la mina El Pinabete, ubicada en Villa Agujita, en el municipio de Sabinas, Coahuila, lugar en el que un desastre provocó la muerte de 10 mineros que continúan sepultados entre carbón y lodo desde el 3 de agosto de 2022.
La organización no gubernamental lamentó por otro lado que no se aplicara igual la ley para la mina 8 de Pasta de Conchos ni para la de Rancherías, también en la región Carbonífera de Coahuila.
No se aplicó en estas ningún procedimiento legal contra los responsables de los fatales accidentes, expuso el organismo social.
En su comunicado en la red del pajarito explicó que en estos casos no se indemnizó a las familias.
A los dueños de las minas no se les investigó ni procesó, y de manera sorpresiva les renovaron el contrato de venta de carbón a Comisión Federal de Electricidad.
En Rancherías fueron siete los mineros que perecieron en una tragedia, mientras que en Pasta de Conchos el 19 de febrero de 2006 un grupo de 65 trabajadores pagó con su vida la extracción de carbón por una explosión en el subsuelo.
De estos últimos, sólo se rescataron dos cuerpos luego del desastre, 63 continúan enterrados en el subsuelo y se mantienen en un prolongado rescate de restos humanos que se ha prolongado por 17 años.