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Los primeros ministros de Ucrania, Polonia, Estonia, Letonia, Lituania, República Checa, Eslovaquia y Moldavia firmaron hoy una carta abierta conjunta en la que piden a las grandes empresas tecnológicas que tomen medidas para evitar la difusión de desinformación procedente de Rusia y de otras "potencias hostiles".
“Plataformas digitales como las suyas se han convertido en campos de batalla virtuales y potencias extranjeras hostiles las están utilizando para difundir falsas narrativas que contradicen la información basada en hechos de los medios de comunicación”, dice la carta, que pide a sus destinatarios que actúen “urgentemente”.
La misiva pide a las empresas que gestionan las redes sociales y otras plataformas de comunicación por internet que no acepten suscripciones u otras formas de pago de personas “sancionadas por sus acciones contra la democracia y los derechos humanos”.
Otra de las demandas es que den prioridad en sus diseños algorítmicos a “la precisión y la verdad” y no al tráfico que generen los contenidos, y abogan por más “transparencia” para que el público conozca los criterios que utilizan para controlar los flujos de información y la manera en que los aplican.
“Las plataformas deben dedicar personal y recursos financieros adecuados para responder de forma efectiva a los retos de la moderación de contenidos”, agrega la carta, que pide que se extreme la vigilancia ante los “deep fakes” y ante los textos producidos con inteligencia artificial.