EDITORIAL

Otra vez el horror

Enrique Irazoqui

La vuelta a la cotidianidad al inicio de cada año siempre toma unos días. Casi nada marcha con normalidad como antes del inicio de las fiestas decembrinas en los primeros amaneceres de enero, pero luego de un tiempo la agenda ordinaria vuelve como de costumbre.

En estas épocas donde se cuenta con un presidente singular, la cobertura mediática que el dignatario le gusta ocupar y sabe cómo hacerlo, está nuevamente presente.

Andrés Manuel López Obrador está ya enfocado en apuntalar su sucesión adelantada y con la misma cantaleta que por años ha utilizado entre liberales "buenos" - los suyos- y los perversos conservadores reaccionarios; hoy el titular del ejecutivo federal está ya dedicado a apuntalar a su elegida, la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, la doctora Claudia Sheinbaum Pardo.

Sus temas estacionales es la defensa irracional de la ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Yasmín Esquivel, acerca de que si plagió o no su tesis para obtener su grado de licenciatura, hecho que al no ser designada como presidenta del máximo tribunal de México debería dejar de ocupar los espacios en los que aún continúa, provocado por la polarización estéril en la que el propio López Obrador ha provocado, o el intento por decretazo de sacar la aviación carguera del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México para enviarlo a Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, la terminal aérea que el actual gobernante se empecinó a construir sin sentido práctico y que ahora a base de disposiciones políticas quiere hacer funcionar para no tener que admitir su eventual fracaso.

Y por supuesto que los temas públicos continúan a nivel local y municipal. En Coahuila han arrancado oficialmente las precampañas con la novedad del rompimiento Ricardo Mejía Berdeja con Morena por no haber sido elegido como su candidato. Bonito sainete montó el ahora exsubsecretario de Seguridad al morderle la mano al régimen que lo revivió políticamente y que al final de cuentas sólo está colaborando en allanarle el camino a Manolo Jiménez Salinas rumbo al Palacio Rosa de Saltillo, sede del poder Ejecutivo estatal.

En Durango, el gobierno trata de poder arrancar la administración que oficialmente tomó posesión el 15 de septiembre del año pasado, pero que, al recibirla en quiebra, poco margen ha tenido para poder imponer su estilo. A eso hay que sumarle las muertes por meningitis provocada por una infección micótica que en rally mató a decenas de mujeres jóvenes.

Las notas pueden seguir de temas varios, pero hay una noticia que debe de propagarse y exigir a todas las autoridades responsables que cumplan con todo lo que les corresponda. Por desgracia se ha confirmado ya otro atroz feminicidio en la región. El pasado miércoles 11 de enero se reportó la desaparición de Dayan Yamil Favela Quiñones de 34 años de edad, sucedida cuando salió de su trabajo en la ciudad de Gómez Palacio.

Fue vista por última vez cuando conducía un automóvil de la marca Ford, línea Figo, modelo 2018, con placas de circulación FFV-615-B.

Tras los hechos, los familiares interpusieron la denuncia correspondiente ante la Vicefiscalía Región Laguna e iniciaron una campaña de búsqueda en redes sociales.

El pasado domingo por la tarde fue localizado el cuerpo de una mujer descuartizada envuelta en bolsas en un predio del ejido Buenavista del municipio de Francisco I. Madero.

Por la naturaleza de los hechos, en la que hoy fallecida es desaparecida en Gómez Palacio, Durango, pero encontrada muerta en Francisco I Madero, Coahuila, de entrada, la investigación obliga a intervenir a ambas fiscalías.

En este momento la vicefiscalía de Durango en Gómez Palacio, tiene ya una persona detenida, y en su caso quizá resulte responsable.

Pero por ningún motivo podemos como sociedad, en este caso lagunera, quitar el dedo del renglón hasta aclarar el terrible asesinato de Dayan. Basta y basta mil veces que cada vez sean más frecuentes las cobardes agresiones contra las mujeres en cualquier forma, no se diga aquellas que terminan fatalmente.

Hoy estamos viviendo el horror del término de la vida de Favela Quiñones, pero si no insistimos que atacar todas las causas que provocan estas atrocidades, al tiempo quizá vergonzosamente se podrían ir haciendo comunes, como otros tantos calamidades ya lo son.

Escrito en: poder, Gómez, temas, Francisco

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