Jaime regresó a trabajar a la mina porque 'se sentía con fuerza'

Al cumplirse una semana de la inundación de la mina "El Pinabete", los familiares de los 10 mineros atrapados en los pozos de carbón de Sabinas, Coahuila, viven una angustiosa espera.

Ante la expectativa de que este miércoles ingresen los buzos para iniciar las labores de rescate, las familias de los mineros que se encuentran dentro de los pozos expresaron su confianza en los trabajos que realizan la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Marina y la Coordinación Nacional de Protección Civil.

Los familiares recalcaron que la incertidumbre que sufren es "desesperante", pues cada minuto que transcurre es vital para que sean rescatados sanos y salvos.

MANTIENEN LA ESPERANZA DE RESCATAR A LOS MINEROS CON VIDA

La señora Magdalena Montelongo Pérez, hermana del minero jubilado Jaime Montelongo Pérez, señaló que toda su familia mantiene la esperanza de que se rescate con vida a los mineros.

"Pienso que ha sido una espera muy larga, muy dolorosa, muy desesperante. Pienso que ellos han hecho hasta lo imposible para hacer esto, pero uno que está aquí se le ha hecho muy eterno estos ocho días, hoy hace ocho días verdad, y ya dicen que ya hoy, de hoy a mañana ya los rescatan. Estamos así con la incertidumbre de que ya en realidad sea verdad", expresó en entrevista con EL UNIVERSAL.

Sentada junto a un altar con la figura de San Judas Tadeo, donde la familia mantiene encendidas dos veladoras con dos fotos del minero Jaime Montelongo, la señora Magdalena comentó que su hermano ya está pensionado, pero regresó a trabajar porque aún se siente con fuerza para seguir laborando, "y no quería trabajar en otra cosa que no fuera esto".

"Él sabía de los riesgos y peligros, porque decía, uno baja, viene a este trabajo, más no sabe si regresa", apuntó.