Migrantes llegan a pie a región Norte
Caminando por la carretera libre Nueva Rosita-Allende, un grupo de 50 migrantes venezolanos llegó a la región Norte de Coahuila; piden a las autoridades les permitan llegar a la frontera con Estados Unidos y además manifestaron su molestia con el Instituto Nacional de Migración (INM) por otorgarles un documento que posteriormente les dijeron que no tenían validez.
"Se nos ha hecho imposible ya que el instituto Nacional de Migración emitió este documento, el cual en días posteriores dijeron que no tenían ningún tipo de validez. Muchos migrantes intentaron pasar comprando pasajes excesivamente caros", manifestó Jul Merizarra, migrante venezolano e integrante del grupo de 50 personas que llegaron al municipio de Allende durante la noche del martes y madrugada de ayer miércoles.
Localizados en una techumbre de un domicilio que está a un costado de la carretera federal 57, entre el kilómetro 53 y el entronque con el municipio de Piedras Negras, descansaban de la caminata que realizaron; dijeron que van a continuar su camino para poder llegar a Piedras Negras.
El migrante venezolano dijo que las autoridades federales bajaron a la mayoría de las personas de los autobuses y señaló que con ello los han expuesto a un clima extenuante y a condiciones inhumanas, además advirtió que hay alrededor de seis mujeres embarazadas y un número similar de menores de edad.
También denunció el maltrato que dan a los migrantes que son detenidos y llevados a una estancia migratoria, por lo que hizo un llamado a las organizaciones internacionales como ACNUR, Unicef y la ONU, pues considera que se están violando, de manera constante, sus derechos como migrantes.
Con relación al documento migratorio que le otorgó el INM, aseguró que no se les dio a conocer que dicho papel no les permitía llegar a los estados fronterizos, pues advirtió que el objetivo de la caravana, al salir de Tapachula, era llegar la frontera norte de México, además dijo que no era un secreto para las autoridades que esa era la petición de la caravana.
Sentada junto a su esposo y otros compatriotas venezolanos, Yanet cuenta que tiene tres meses de embarazo y que estuvo en una estancia migratoria en Tapachula, Chiapas.
Ahí se sintió enferma y solo le dieron antibióticos, pero al salir fue hospitalizada por una amenaza de aborto, al encontrarse ya cerca de la frontera con Estados Unidos, la migrante hizo un llamado a las autoridades en México.
"Le pedimos apoyo al Estado Mexicano que nos permita, por favor, llegar a nuestro destino… hay mujeres embarazadas, niños y hombres que ya no pueden caminar porque tienen los pies malos. No nos queremos quedar en México, esa es la verdad, queremos avanzar", concluyó.
CARAVANA REBASA CAPACIDADES DE CASA DEL MIGRANTE
La Casa del Migrante informó que debido a que el contingente de migrantes venezolanos que llegó a Saltillo es muy grande, el albergue se encuentra imposibilitado de recibirlos.
José Luis Manzo Ramírez, encargado del área de Atención Humana, indicó que no se tiene la capacidad ni las medidas para su atención.
Añadió que lo anterior se suma a que la Jurisdicción Sanitaria VIII aplicó algunas pruebas COVID-19 a extranjeros, las cuales salieron positivas, por lo cual sería un riesgo.
"Sabemos que la Jurisdicción Sanitaria les aplicó algunas pruebas y muchas salieron positivas y no están queriendo seguir el protocolo de prevención si llegaran a venir al albergue. Es un contingente muy grande y no tenemos la capacidad", dijo.
Explicó que hasta el momento se tiene un registro normal, pues los grupos de venezolanos que estaban en la central camionera no habían llegado al albergue.
"Solo alrededor de 11 de esta nacionalidad han entrado y salido para comer, descansar y bañarse", explicó.