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Reserva natural Bokeiorda, hogar seguro para antílopes saigas

A fines del siglo XX se había reducido su población en más de un 90 % y está en peligro de extinción

Reserva natural Bokeiorda, hogar seguro para antílopes saigas

Reserva natural Bokeiorda, hogar seguro para antílopes saigas

EFE

La reserva natural Bokeiorda, cuya creación ha anunciado Kazajistán, permitirá proteger la población de antílopes saigas, endémicos de este país, que a fines del siglo XX se había reducido en más de un 90 % y que se encuentra en peligro de extinción.

"La creación de la reserva natural Bokeiorda es un nuevo paso importante para continuar restableciendo la población de saigas en Kazajistán", afirmó hoy a Efe Ayan Meirash, portavoz del comité forestal del Ministerio de Ecología y Recursos naturales de esta nación centroasiática.

El presidente de Kazajistán, Kasim-Yomart Tokáyev, anunció en una reunión con el ministro de Ecología, Magzum Mirzagaliev, la decisión de destinar un área de 657,000 hectáreas a la reserva Bokeiorda y el vedado natural Ashiozeks, en la región occidental del país, lo cual facilitará la migración de estos bóvidos.

Según comentó a Efe la portavoz del Ministerio de Ecología, Samal Ibráeva, la cantidad de estos animales, que se distinguen por tener una nariz parecida a una pequeña trompa y cuyos cuernos son altamente valorados por la medicina china, cayó de más de un millón en 1990 a poco más de 21,000 en 2003.

Ya en 2002 la especie había sido incluida en la "Lista Roja" de animales en peligro critico de extinción de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).

"Las principales razones de la reducción de población de esta especie fueron las enfermedades y la caza furtiva", explicó Ibráeva.

No obstante, en los últimos dos años, la población de esta rara variedad de antílopes se elevó casi al doble -de 334,000 a 842,000- gracias a un conjunto de medidas encaminadas a la conservación de estos animales, según Mirzagaliev.

La inmensa mayoría de la población del saiga tatarica, habita en esta nación centroasiática, aunque hay también en el sur de Rusia y en Uzbekistán.

Ibráeva señaló que en 2005 el Gobierno kazajo adoptó el primer programa para la conservación de especies raras y amenazadas de ungulados y saiga, que se concentró en la protección de estos animales en los espacios de reproducción y durante la temporada invernal y sus migraciones.

Ademas, se crearon las reservas naturales estatales Irgiz-Turgaysky (región de Aktobe, oeste) y Altyn dala (región de Kostanay, norte).

Entre las medidas tomadas por el Gobierno kazajo para proteger esta especie está la penalización de la caza furtiva instituida en 2012 y extendida hasta 2023, con penas de hasta 12 años de cárcel y confiscación de bienes.

Los cuernos de este antílope suelen ser una presa codiciada por la medicina tradicional china, que la utiliza para todo tipo de enfermedades y puede llegar a pagar hasta 5,000 dólares (unos 4,000 euros al cambio actual) por una pieza, lo cual atiza la caza furtiva y el mercado negro.

Escrito en: población, estos, natural, reserva

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