'El dijo que no me podía ayudar': presidenta de Alas de Esperanza

Para Olga Lidia Saucedo García, presidenta de la asociación civil Alas de Esperanza, que representa a familiares de personas desaparecidas en Allende y municipios aledaños; la detención de Sergio Alonso Lozano Rodríguez representa que se está haciendo justicia. Aunque considera que aún faltan más involucrados.

Dijo no congratularse de la detención del exalcalde de Allende, pues reconoce el dolor por el cual está pasando su familia, sin embargo estableció que al menos ellos saben que podrán visitarlo en el centro penitenciario de Piedras Negras, mientras que los familiares de desaparecidos no.

“Yo lo siento ahorita por la familia de él, por el dolor que están pasando; pero a la hora que ellos quieran pueden ir a verlo al Cereso y nosotros, a nuestros seres queridos desaparecidos que ya no están con nosotros, nunca más los vamos a volver a ver. Lo siento ahorita por su familia”, refiere Saucedo García.

Consideró que no nada más es Lozano Rodríguez, que tiene que haber más y respecto a los cinco años que han transcurrido de cuando se privó de la libertad a decenas de personas en Allende y su desaparición, consideró que poco a poco se va aclarando estos hechos y van viendo la luz.

“¿Qué porque dicen que después de cinco años? Será porque apenas nos estaban escuchando las autoridades. Ya ahorita las autoridades están trabajando y no nada más aquí en Allende, Piedras Negras y donde hubo personas desaparecidas se está trabajando”, precisó la presidenta de Alas de Esperanza de Allende.

Estableció que lo que está ocurriendo ahora es consecuencia de lo que sucedió en el 2011. Y recordó que en enero de 2012 acudió a la presidencia municipal de Allende y se reunió con Sergio Alonso Lozano Rodríguez, en ese entonces alcalde del municipio para solicitarle ayuda para localizar a su hija; aunque su petición no tuvo eco.

“Pues que él en ese momento no me podía ayudar. Fue el 17 de enero de 2012, que no me podía ayudar y me imaginé que como mi hija había desaparecido en Piedras Negras, pues él no podía hacer nada… Nada más dijo que no podía ayudarme y fue todo lo que dijo. Fue la primera y única vez que me arrime a hablar con él”, recordó Saucedo García.

Una herida abierta

Actualmente Alas de Esperanza cuenta con un total de 90 expedientes de reportes de personas desaparecidas tanto de Allende como de municipios de los cinco manantiales; entre ellas la desaparición de su hija Atsi Adanary Reina Saucedo, su yerno Alfredo Ruiz, así como la mamá (Juanita Rodríguez), la hermana (Roxana Ruíz de Villa), el esposo de ésta (Antonio Villa), así como el hijo de ambos (José Antonio) de 14 años; durante la noche del 18 de diciembre de 2011.

Olga Lidia Saucedo recibió la noticia este año de que su hija fue una de las 34 víctimas que las autoridades estatales han identificado y que fueron desaparecidas en el interior del Centro Penitenciario de Piedras Negras. Recordó que su hija y su yerno estaban en una reunión con el padre de la joven, cuando Alfredo Ruiz recibió una llamada y le pidieron que fuera a casa de su madre en Piedras Negras y ya no supieron más de ellos.

“Mi hija va a cumplir cinco años (desaparecida), ahora en diciembre. Mi hija desaparece y aunque yo ya sé cómo terminó mi hija. La herida sigue abierta, la herida no se te va a quitar jamás. Fue una muchachita de 22 años que le truncaron, a su esposo y toda su familia. Eso no se va acabar, eso no porque veo a mis hijos (nietos) creciendo sin papá y sin mamá. No lo podemos olvidar y la herida que tenemos, nos siguen echando limón, todavía”, relató con lágrimas y la voz entrecortada.