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Durante la Antigua Grecia, la enseñanza de la filosofía se consideró esencial para el desarrollo humano. Se puede recordar a la escuela peripatética, la cual seguía las enseñanzas del filósofo Aristóteles. Sus miembros recibían el nombre de “peripatéticos", porque solían debatir pensamientos mientras caminaban por un patio.
Así mismo, la teología también se ha valido de la filosofía para el análisis de sus conceptos. “La filosofía es sierva de teología”, indica una frase latina. Sobre esta última relación, el Instituto Diocesano Benedicto XVI ha abierto esta semana un nuevo programa académico reestructurado para el profundo estudio de la filosofía y la teología.
Dentro de los cursos, los interesados podrán estudiar materias como Introducción a la Filosofía, Método Teológico, Antropología Filosófica, Patrística, Fe y Ciencia, entre otras.
Además, al plan de estudio se añade por primera vez la enseñanza de la lengua latín, del cual provienen cerca del 70 por ciento de las palabras usadas en el castellano.
Se informó que las clases se impartirán en la Parroquia de San José, ubicada en la calle Rayón e Ignacio Ramírez, en Gómez Palacio.
Para mayores informes sobre precios y horarios se dispone la página de Facebook Instituto Diocesano de Teología y Pastoral, además del correo electrónico [email protected].