Decomisa policía de El Salvador 5,500 paquetes de cigarros de contrabando
La Policía Nacional Civil (PNC) de El Salvador decomisó un cargamento de 5,500 paquetes de cigarros de contrabando de origen chino con un valor económico de 153,900 dólares, informó este miércoles el cuerpo de seguridad.
La fuente explicó que los paquetes, que contienen 10 cajetillas de cigarro cada uno, fueron "abandonados" en el Cantón Jerónimo, en la occidental localidad de Metapán, en una zona fronteriza de El Salvador con Guatemala y "fueron introducidos al país de contrabando".
Además, indicó que fueron capturados Óscar Vladimir Morales Ochoa y Sofía Isabel Aguirre Alarcón, de 28 y 19 años, respectivamente, quienes serán acusados ante los tribunales por el delito de contrabando de mercadería.
De acuerdo con datos de la PNC, en lo que va de 2019 se ha decomisado 25,049 paquetes de cigarrillos de contrabando, cuyo valor económico ronda los 713,896 dólares.
Un estudio de la firma CID Gallup señala que anualmente El Salvador consume 940 millones de dólares en cigarrillos, de los que el 31 % son ilícitos, segunda cifra más alta de Centroamérica.
Según las autoridades de seguridad del país centroamericano, además de atentar contra la seguridad de El Salvador, las pandillas Mara Salvatrucha (MS13) y Barrio 18 minan la salud y la economía del país al abrigar el contrabando de cigarrillos en los territorios que controlan, en su mayoría zonas populosas o marginales.
Las pandillas no tienen una participación directa en la introducción y distribución de los cigarros, pero se lucran al permitir que las estructuras del crimen organizado dedicadas a estas actividades operen en las zonas donde están afincadas, según la PNC.
Estas estructuras criminales, un fenómeno considerado como herencia de la guerra civil (1980-1992) y que se fortaleció con la deportación de pandilleros de Estados Unidos, han resistido a los planes de seguridad implementados en las últimas cuatro Administraciones.